Acondicionamiento del borde portuario de Porto Do Son.Porto do Son, A Coruña. España
- Juan Creus Andrade
- Covadonga Carrasco López
- Marcial Rodríguez Rodríguez
- Alberto Redondo Porto
ISSN: 1695-2308
Ano de publicación: 2023
Número: 423-424
Tipo: Artigo
Outras publicacións en: On diseño
Resumo
Valoración del jurado: Una intervención sensible con la historia del pueblo pesquero que devuelve el contacto con el mar, perdido por la presencia del tráfico. A través de una serie de operaciones coherentes de reinterpretación de conexiones, direcciones, pavimentos, mobiliario y elementos singulares, se crea una secuencia de espacios de paseo, descanso y encuentro capaces de acoger una variedad de actividades donde el transeúnte y naturaleza recuperan el protagonismo. Se valora el uso responsable de recursos económicos, materiales y técnicas constructivas que tienen en cuenta la recuperación de los sistemas naturales. Transformación integral del frente urbano y borde portuario de Porto do Son (A Coruña), motivada por los diferentes conflictos de uso, la difícil convivencia entre tráficos portuarios y ciudadanos, el aparcamiento masivo o la creciente actividad comercial y de estancia en este lugar emblemático de 25.843m² de superficie. La obra afronta, en un tramo de 635m. de longitud y ancho variable entre 85 y 15m., la ordenación de los accesos, separando de la fachada el vial principal y definiendo un gran espacio público, verde y pavimentado que recupera la relación entre el casco histórico y el puerto. La actuación se inicia en la zona del Cruceiro, calmando el tráfico de la AC550 mediante una glorieta y creando un mirador con arbolado que, como nueva plaza, sirve de entrada al núcleo. A partir de ahí, sobre un muro de contención existente, se define un paseo de prefabricados de hormigón desactivado, ligeramente volado, que da acceso a la playa y al parque. La urbanización se desarrolla como plataforma única donde pavimento y arbolado delimitan los usos y la propia significación de los espacios. Hormigón desbastado (con diferencias de matiz de tono entre rodado y peatonal), piedra y tierra, son los principales materiales de la plataforma. Las calles de piedra, desde el interior del núcleo, alcanzan el mar mediante entradas escalonadas, gradas y balcones. Los detalles de urbanización, bien mediante líneas (rigolas, bordes-bancos) o elementos puntuales (alcorques, palmeras existentes o nuevos árboles) matizan las diferencias de uso. A La altura del mercado, como contrapunto que centra la nueva actuación, se define una estructura de postes y vigas cruzadas de madera que devuelve la memoria de los secadoiros de redes, hoy desaparecidos, que tanto identificaban esta fachada. Este espacio servirá de soporte para cubriciones temporales donde desenrollar actividades diversas (cine y exposiciones al aire libre, conciertos, extensión del mercado…). Un poco más adelante se delimitan también dos grandes superficies: una libre, en piedra, donde se puede situar la carpa para la fiesta; y otra arbolada, con pavimento de tierra, que complementa la anterior y da comienzo a un gran espacio que extiende los árboles hasta el espaldón portuario. El paseo de borde, que da también servicio a la zona de pantalanes, se resuelve a una cota de 45 cm por debajo del espacio central. Ese borde de piedra permite sentarse, acompañando todo el paseo en esta zona, sirviendo de descanso frente al mar. La conexión entre ambos se hace por medio de pequeñas rampas que lo cruzan como prolongación de las calles hasta acercarse a la escollera. En la zona final, se sitúan la edificación para un nuevo Club Náutico y el resto del espacio arbolado que, en esta parte, da cabida a las plazas de aparcamiento que se necesitan. La forma del edificio aprovecha el espaldón como pared y le da fin, creando un mirador hacia Monte Louro que sirve de fondo de la actuación.