El buen profesor de Educación Física
- Eloy José Villaverde-Caramés 1
- Óscar Romero Chouza 1
- María Ángeles Fernández-Villarino 2
- Miguel Ángel González Valeiro 3
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1
Universidad Europea de Madrid
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2
Universidade de Vigo
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3
Universidade da Coruña
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Editorial: Instituto Politécnico da Guarda
ISBN: 978-972-8681-70-8
Ano de publicación: 2017
Páxinas: 104
Tipo: Achega congreso
Resumo
Introducción: Es indudable la importancia de la Educación Física (EF) en la mejora de la salud pública, siendo la formación de su profesorado esencial. Evaluar este proceso formativo es necesario (Webster et al., 2015), ya que además de conocer cómo este colectivo se incorpora a un programa de formación, es importante conocer cómo aprenden e interactúan en el mismo (Richards, Templin & Graber, 2014). Lamentablemente la socialización profesional sólo es analizada desde la figura del profesor (Schempp & Graber, 2015). Objetivo: La finalidad del presente trabajo ha sido conocer la concepción del alumnado en formación universitaria, profesorado de EF en enseñanza secundaria y formadores de formadores sobre lo que representa ser un buen profesor de EF en enseñanza secundaria. Muestra: La muestra del estudio era el alumnado de la Universidad de A Coruña (n=123) que en los cursos 2013-2014 y 2014-2015 estuvo matriculado en 4º de Grado (Licenciatura) en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (final del primer ciclo de estudios), profesorado de EF (n=93) de centros educativos en el ámbito de influencia de la universidad, y formadores de formadores (n=13) del grado mencionado. Metodología: La metodología fue descriptiva, empleando como instrumento de recogida de información el cuestionario. Para categorizar las respuestas obtenidas se creó un grupo de expertos y se estableció un razonamiento deductivo, desde la literatura existente; e inductivo, analizando las respuestas de cuestionarios entregados al alumnado en una prueba piloto previa. Resultados: Las características que mejor definen a un buen profesor para el alumnado son su actitud profesional (26,5%) e intervención pedagógica (19,8%), descartando las orientaciones filosóficas (0%); para el profesorado de EF son su actitud profesional (26,8%) y rasgos personales (13%), con escaso interés hacia efectos específicos del producto (3,3%) y evaluación (3,3%); y los formadores de formadores destacan la actitud profesional (22,2%), capacidad científica (13,3%) y efectos generales del producto (13,3%), rechazando los efectos específicos del producto (0%). Conclusión: La actitud profesional es el atributo que se repite en los tres colectivos, no hallando consenso para la segunda mejor categoría. Las orientaciones filosóficas para el alumnado, evaluación para el profesorado de EF, y efectos específicos del producto para el profesorado de EF y formadores de formadores no son rasgos importantes, en contra de lo revisado en la literatura.