Percepción sobre la formación del profesorado para educar en hábitos saludables

Resumo

Transmitir a los escolares la necesidad de mantener unos hábitos de vida saludables es uno de los principales objetivos del currículo de multitud de países (Alfrey et al., 2020; Kirk et al., 2017; Zolghadri et al., 2019). Así lo reflejan las normativas internacionales desde hace décadas, destacando: (1) el Marco para la planificación y la ejecución de programas de vida activa en y mediante las escuelas (World Health Organization [WHO], 1998), (2) el Plan de acción mundial sobre actividad física (WHO, 2018), o (3) el 3º Objetivo de Desarrollo Sostenible destinado a garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades (United Nations, 2020). Considerando que una las premisas del docente es adaptarse a las necesidades que la sociedad demanda (Imbernón, 2017), parece lógico que deba dominar los contenidos de salud, impartirlos adecuadamente y sentirse competente para ello (Cañadas et al., 2019; Rodríguez et al., 2018). En este sentido, las principales finalidades de la Educación Física (EF) serán preparar al alumnado para ser físicamente activo y proporcionarle oportunidades de práctica para adoptar un estilo de vida saludable (Webster et al., 2015). No obstante, el profesorado parece no sentirse competente en esta materia y estima necesaria la instauración de programas formativos que aborden esta cuestión (Rodríguez et al., 2018). Esta investigación pretende conocer las percepciones del futuro profesorado de EF sobre su competencia profesional para fomentar hábitos de vida saludables en el entorno escolar.