Los fallos en la comunicación de las crisis marítimas en Españala necesidad de avanzar en la figura del informador de crisis

Resumo

La falta de acierto en la atención de los aspectos sociales y comunicativos en la gestión de las últimas crisis marítimas acaecidas en Europa nuestro -Erika y Prestige- ha perpetuado un clima de desconfianza ciudadana hacia la capacidad de autoridades y expertos en la resolución de situaciones de crisis y en la toma de decisiones de riesgo. Esta situación supone una grave dificultad a la hora de implementar las exigencias de la Directiva Europea 2002/59/CE, de 27 de junio de 2002, relativa al establecimiento de un sistema comunitario de seguimiento y de información sobre el tráfico marítimo y sobre el diseño -por parte de los Estados miembro- de planes para albergar en sus lugares o puertos de refugio a buques que se encuentren en peligro y supongan una amenaza para la vida de sus ocupantes o para el medio marino. En este sentido, en este artículo se propone un avance de los resultados de la última fase de trabajo de investigación del proyecto "Seguridad Marítima y Protección Ambiental: criterios para la aceptabilidad social de los puertos refugio en España" (Ref. CSO200800324/SOCI) en el que se analizaron la gestión de las últimas catá strofes y crisis marítimas desde punto de vista informacional, atendiendo a los aciertos y los er rores cometidos en el proceso de comunicación política, mediática y social, con el objetivo de encontrar un modelo de comunicación en el que participen todos los actores implicados en la controversia de la seguridad marítima y que facilite el proceso de toma de decisiones sobre la ubicación de los puertos o lugares de refugio en base al consenso y fortalecimiento de la confianza y solidaridad entre actantes.