El Barrio del Carmen de Lugo. Evolución Histórica y Urbanística
- Cabarcos Rodríguez, Ramón Manuel
- Ana Cabana Iglesia Director/a
Universidad de defensa: Universidade de Santiago de Compostela
Fecha de defensa: 28 de febrero de 2020
- Urbano Fra Paleo Presidente/a
- Ana Eulalia Goy Diz Secretario/a
- Luz Paz Agras Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La cartografía antigua de Lugo refleja una urbanización uniforme en torno a la muralla, pero en los siglos XIX y XX, se ha olvidado un ámbito de su contorno, llegando a recordar a un pastel en porciones, sin una de estas. La causa pasa por un prolongado aprovechamiento agrario, acompañado de una topografía con acusada pendiente. En 1969, es determinante la desaparición de la licencia directa municipal, que trajo la sensación de provisionalidad o de que “todo esto se va a tirar”, así como la apertura de la Segunda Ronda y la calle Noriega Varela (que asumió el anterior tráfico de la calle del Carmen). El mayor intento y fracaso es el de la reparcelación de 1973. A partir de ahí viene la dificultad para aprobar un PAU, y un punto de inflexión en la sentencia judicial que provocó la revisión del PGOUM de 1992. Una posterior fuerte expansión inmobiliaria y una gran oferta alternativa periférica, con menos dificultades, trajo un notable desinterés por esta zona. El vigente PERI-6 contempla una elevada edificabilidad, pero con dos notables dificultades: el Camino Primitivo y las expectativas arqueológicas. La actualidad presenta una elevada degradación urbana y social, imposible de invertir de manera endógena, y una inacción continuada de los agentes privados y, sobre todo, entidades públicas, por su incertidumbre y complejidad. El futuro no pasa ya por un uso global residencial. Su valor es superior, de naturaleza colectiva y ligada al disfrute colectivo (paseo, recreo, turismo, comercio menor, ocio, fiesta o cultura). No ha lugar al requisamiento de la propiedad, pero tampoco al libre acuerdo entre propietarios, porque el beneficio no es solo para aquellos sino para toda la ciudad. El futuro pasa por la ordenación, no guiada por las leyes del mercado, y la conservación de la memoria colectiva y su patrimonio.