Atención sanitaria en España a personas transexuales y con variantes de género: historia y evolución
- Esther Gómez Gil
- Isabel Esteva de Antonio
- María Cruz Almaraz Almaraz
- Nuria Asenjo Araque
- María Fernández Rodríguez
- Felipe Hurtado Murillo
- Jesus Manuel Perez Luis
- Carmen Sanisidro Fontecha
- Laura Gallardo 1
- Angel Luis Montejo González
- Rosa María Fernández García
- 1 Hospital Clínico Universitario. Valladolid.
ISSN: 2565-0564
Año de publicación: 2019
Número: 11
Páginas: 63-75
Tipo: Artículo
Otras publicaciones en: Psicosomática y psiquiatría
Resumen
Objetivos: El objetivo de este artículo es analizar cronológicamente los inicios y evolución de la atención sanitaria en España a la transexualidad y variantes de género. Metodología: Se realiza un estudio descriptivo basado en la literatura publicada sobre atención sanitaria a la transexualidad en España, y en la información personal aportada directamente por los profesionales de las Unidades de Género y equipos emergentes de las diferentes comunidades autónomas. Resultados: La primeras reseñas históricas datan de los siglos XV y XVI. En fechas recientes, en el ámbito privado, las primeras vaginoplastias se realizan en el año 1983 y la primera faloplastia en 1989. En hospitales públicos, desde 1986 hay referencias aisladas en historias clínicas de atención psicológica, psiquiátrica o endocrinológica a estas personas, a pesar de la ausencia de respaldo legal. La creación de unidades de identidad de género se inicia en Andalucía (1999), y progresivamente se crean las unidades de Cataluña, Madrid, Aragón (2006), Asturias (2007), País Vasco, Comunidad Valenciana y Canarias (2008), Navarra (2010) y Castilla-León (2014). En los últimos 5 años el resto de comunidades comienzan a diseñar nuevos equipos y protocolos de atención, y se producen cambios en los modelos asistenciales en el contexto de las demandas de colectivos por la autodeterminación del género y descentralización. Conclusiones: En España en los últimos 20 años se han creado de forma secuencial varias unidades multidisciplinares de identidad de género en diversas comunidades, que han alcanzado niveles de calidad, a pesar de los limitados recursos y de las inequidades entre comunidades. En los precedentes 5 años se han producido cambios en estos modelos de atención que, en algunos aspectos metodológicos, difieren de las guías clínicas existentes en los países europeos de nuestro entorno.